Enamorarse es una de las experiencias más subjetivas que puede vivir un ser humano, sin embargo, existen indicadores de comportamiento que la ciencia logró identificar para empezar a responder este interrogante.
De acuerdo a estudios psicológicos, el enamoramiento es una excitación fisiológica intensa, un estado de interés total en el otro individuo, donde la elaboración de fantasías acerca de la otra persona y cambios de emoción son relativamente rápidos.
Esto se debe a la liberación que hace el cerebro de dopamina, serotonina y oxitocina, que nos genera un subidón y nos hace percibir la vida más alegre según la psicóloga Sonia García, autora del libro Parejas felices, parejas satisfechas.
Como se mencionó anteriormente, cuando se está enamorado, el cuerpo libera diversas sustancias químicas. La dopamina genera emociones placenteras y sensaciones de recompensa, mientras que la oxitocina promueve la unión y el apego.
También hay un aumento de la adrenalina y la frecuencia cardíaca. Estas sustancias trabajan juntas para crear sentimientos intensos de alegría, aprecio y pasión, contribuyendo a la experiencia del enamoramiento.
