Los mitos y las leyendas explican gran parte de la historia o, al menos, la hacen más llamativa y entretenida. Muchas veces episodios que ocurrieron son acompañados de situaciones que, en realidad, son fruto de la imaginación.
El origen de las leyendas se remonta a hace muchísimos años, cuando las sociedades primitivas intentaban darle sentido al mundo. Estas narraciones eran transmitidas de generación en generación, lo que permitía que se adaptaran y transformaran con el tiempo.
A medida que las civilizaciones avanzaban, estas historias comenzaron a ser recogidas por escrito, fijando ciertas versiones que se han mantenido hasta nuestros días. En este proceso, la historia se entrelaza con la ficción y crea un tejido complejo que desafía nuestra capacidad para distinguir entre lo real y lo imaginario.
En pleno siglo XXI, donde mucha información circula por las redes sociales estos “mitos históricos” aparecen como hechos consumados. Un sitio de historia, precisamente, desmiente a algunos de ellos.

12 mitos históricos que mucha gente sigue creyendo
El sitio History Snob derriba varios de estos famosos mitos:
1) Napoleón era bajito
Muchos piensan que era bajo, pero ello es cierto si toman las estaturas actuales (en Francia, para los hombres, es 1,78 m). Napoleón tenía una estatura promedio para su época: 1,57 m.
2) Terraplanismo medieval
También es común pensar que durante la Edad Media la gente creía que la Tierra era plana. Sin embargo, Galileo no fue perseguido por la Iglesia por sugerir que era redonda, porque ya lo habían aceptado, sino por afirmar que no era el centro del Universo.
3) Luchas de gladiadores
No tenían que luchar hasta que uno muriera, como sugiere la famosa película Gladiador. Las luchas eran más parecidas al boxeo y su resultado muchas veces estaba predeterminado (eso sí lo muestra el filme).
4) Estatuas blancas
Las esculturas griegas y romanas actuales son blancas, pero los artistas antiguos usaban colores. Fueron los renacentistas quienes las reconstruyeron del color que muestran ahora.

5) La gente medieval no se bañaba
Este es otro error común, ya que resulta que en la época medieval la gente se bañaba con frecuencia. De hecho, se esperaba que la gente estuviera limpia antes de ir a la iglesia los domingos.
6) ¡Que coman pastel!
María Antonieta tiene mala fama por responder a los revolucionarios franceses con esa frase En realidad, nunca dijo eso, pues era inteligente y caritativa. Muchos sospechan que, en realidad, dijo que el pueblo debería comerse “la corteza del paté”.

7) Cascos vikingos
Las series y películas nos hicieron creer que los vikingos usaban cascos con cuernos. En realidad, no se han encontrado cascos con cuernos pertenecientes a su época, sino datados mucho antes, en la Edad de Bronce.
8) Sombreros de cowboy
Las películas pueden hacer creer que todos los vaqueros usaban los famosos sombreros de ala ancha, pero, en realidad, la mayoría prefería el sombrero Derby, también conocido como bombín. El Stetson no se popularizó hasta finales del siglo XIX, aunque la compañía que los confecciona nació en 1865.
9) La guerra de los mundos
Muy conocida es la historia de que al transmitirse por radio la novela de HG Wells La guerra de los mundos mucha gente entró en pánico. Solo hubo dos incidentes aislados. Los periódicos, para descreditar a la radio, hicieron el resto.

10) El inventor de la lamparita
A Thomas Edison se le atribuye la invención de muchas cosas, incluyendo la lamparita, en 1879. Pero hubo varios inventores que contribuyeron a este adelanto, del cual Edison tomó el mérito.
11) Mickey Mouse
Tampoco fue Walt Disney quien creó a Mickey, pero se llevó el crédito después de contratar a Ub Iwerks para transformar a Oswald el afortunado, un personaje en forma de conejo, en una variante de ratón, en 1928.
12) Las brujas de Salem
Los Juicios de Salem (1692-1693) son un ejemplo de la subyugación y el tormento que sufrieron las mujeres en esa época. Sin embargo, el asunto de la quema en la hoguera es falso: las mujeres fueron ejecutadas mediante métodos más tradicionales.