Lorenzo Somaschini, el niño prodigio del motociclismo argentino que estaba internado desde el último viernes tras sufrir un gravísimo accidente durante los entrenamientos de la cuarta fecha de la Copa Honda Junior del Campeonato de Superbike de Brasil, murió este lunes por la tarde, según confirmó esa categoría a través de un comunicado oficial.
“La SuperBike Brasil informa, con gran tristeza y dolor, el fallecimiento del conductor Lorenzo Somaschini este lunes (17/6), a las 19h43. El argentino, nacido del Rosario, fue ingresado en el Hospital Albert Einstein, en São Paulo (SP), bajo cuidados médicos intensivos y, lamentablemente, no resistió”, publicó la cuenta de Instagram de Superbike Brasil.
Somaschini se golpeó fuertemente la cabeza en una caída que sufrió en la curva Pinheirinho del Autódromo de Interlagos, en San Pablo, habitual escenario de la Fórmula 1. Allí se llevaba a cabo una nueva escala de la Copa Honda Junior, una de las competencias juveniles más reconocidas en el continente americano que reúne a corredores de entre 8 y 16 años en motocicletas de 160 centímetros cúbicos con pedales y manillares adaptados a la talla de cada participante.
Tras el accidente, Lorenzo fue atendido de urgencia en la sala médica del circuito y una vez estabilizado, fue trasladado en una ambulancia de alta complejidad hasta el Hospital General de Pedreira. En ese centro de salud permaneció hasta la mañana del sábado, cuando fue derivado Hospital Albert Einstein, especializado en emergencias.
«Todos en el equipo de SuperBike Brasil están consternados por el evento y expresan sus sinceras condolencias a todos los familiares y amigos de Lorenzo», completó su texto la categoría.
Lorenzo Somaschini: su debut en el exterior y el sueño de llegar al MotoGP
Somaschini, nacido el 17 de julio de 2014, es un apasionado por las motos. A los cuatro años, su papá le regaló una minimoto y desde entonces no paró de mostrar un talento innato que le permitió incursionar prematuramente en competencias de su categoría. Se formó en la escuela de Diego Pierluigi y en abril pasado había debutado en la Junior Cup del Superbike Argentino.
«Mi sueño es llegar al MotoGP, ser campeón del mundo”, le había dicho el pequeño al medio especializado Paseo Tuerca tras su primera gran experiencia deportiva.
Y, en diálogo con La Capital de Rosario, había profundizado: “Un día mi papá me llevó al súper a cargar nafta, no me acuerdo bien, pero dimos una vuelta en una 125 centímetros cúbicos que era de mi abuelo y me encantó. Ahí me agarró eso que no sé cómo explicarlo. Me gustó mucho y bueno…me empezaron a fascinar las motos y acá estoy, listo para correr”.
En esa misma nota le preguntaron si sentía miedo ante una posible caída. Y respondió: «No, pero al principio lo tuve. Cuando veo que me voy al piso trato de hacerme una bolita y pienso en que no será nada…»
La semana anterior, luego de haber participado en una prueba en San Nicolás, Lolo había viajado a Brasil para tener su primera experiencia en el exterior.
Tras conocer la lamentable noticia, Pierluigi le dedicó un sentido mensaje en Instagram. «Me tengo que despedir de vos. Te voy a extrañar mucho Lolito. Gracias por dejarme ser parte de tu sueño. Descansa en paz campeón», escribió el instructor, junto a una foto en la que apoya su cabeza en el casco del nene, que está subido en una motocicleta.