En un mail para sus empleados, el fundador y CEO de Globant, Martín Migoya reconoció el recorte del 3% de la plantilla de personal de la empresa a nivel global. Serían unos 1.000 puestos de trabajo. La confirmación llega tras semanas de rumores y transcendidos y luego de que la compañía confirmó el cierre de por lo menos dos de sus oficinas en Argentina, que habían sido inauguradas después de la pandemia en 2020.
Aunque a este unicornio argentino no le gusta hablar de «crisis», la decisión de achicar la compañía responde a un ajuste luego de un mal balance en el primer trimestre del año y un «castigo» de los inversores: la acción de Globant cae más de 58% en Wall Street en lo que va del año, en medio de una reconfiguración de su negocio, lo que el propio Migoya definió como «Visión 2030»:
«Para hacer realidad esta visión, hemos evolucionado en cómo salimos al mercado, cómo generamos valor y cómo organizamos nuestro talento y equipos. Esta nueva visión nos obligó a tomar decisiones muy pensadas, aunque difíciles, como parte del proceso de reinvención», reconoció Migoya en una comunicación interna que trascendió en las redes sociales y detalló: Soy consciente de lo duro que es ver partir a colegas valiosos debido a estos cambios y a esta nueva visión. Estos cambios afectaron a aproximadamente el 3% de nuestros Globers«. Antes de estos anuncios, la plantilla de la empresa ascendía a 31.280 empleados. En Argentina, Globant emplea 5.000 personas.
«Quiero que sepan que estas decisiones se tomaron con sumo cuidado y reflejan nuestro compromiso continuo de mantener a Globant en la vanguardia de nuestra industria», sostuvo el empresario, que aseguró que con este anuncio, el proceso de reestructuración se encuentra finalizado. «A partir de hoy, la transición está completa. Nuestra nueva estructura de equipos, rediseños y evaluaciones ya están listos».
Consultadas por Clarín fuentes de la empresa no hicieron declaraciones sobre esta medida. En off the record, fuentes del sector aseguraron que, pese a los anuncios, todavía hay temor entre los empleados, llamados «Globers» sobre nuevas salidas o desvinculaciones. Es que hace menos de diez días, la compañía negó a los medios que hubiera despidos como parte de la estrategia para recomponer los balances y hacer frente al impacto de la IA.
Lo que sí había confirmado fue el cierre de dos de las 14 oficinas que tiene en el país: una ubicada en Resistencia y otra en Ushuaia, que había sido inaugurada hace menos de tres años. Fuera de micrófono, algunos empleados de la firma advierten que los cierres de sedes podrían multiplicarse en otros puntos de la Argentina.
«Desde el primer día, la mentalidad de Globant ha sido anticiparse a lo que viene. La reinvención no es algo a lo que recurrimos de vez en cuando, es la forma en que lideramos. Cada cambio que hacemos está guiado por un objetivo: seguir siendo pioneros en cómo la tecnología, la creatividad y la IA moldean el futuro, tanto para nuestros clientes como para nosotros mismos», aseguró Migoya en su comunicación.